martes, 8 de enero de 2013

Una historia para reflexionar: el pescador y el banquero.



Un banquero de inversión estaba en el muelle de un pueblecito costero cuando llegó un bote con un solo pescador. Dentro del bote había varios atunes de buen tamaño. El banquero elogió al pescador por la calidad del pescado y le preguntó cuánto tiempo le había tomado pescarlos, a lo que el pescador respondió que sólo un poco de tiempo.
Banquero.- ¿Y por qué no permanece usted más tiempo y saca más pescado?
Pescador.- ¿Para qué? Tengo lo suficiente para satisfacer las necesidades inmediatas de mi familia.
Banquero.- Pero ¿qué hace usted con el resto de su tiempo?
"Pescador.- Pues duermo hasta tarde, pesco un poco, juego con mis hijos, hago la siesta con mi señora, María, voy todas las noches al pueblo a tomarme un vino y a tocar la guitarra con mis amigos. Tengo una vida ocupada y amena."  

El banquero le explicó que era un experimentado inversor y que podría ayudarle. Debería pescar durante más tiempo, y con los ingresos comprar un bote más grande, con los ingresos del bote más grande podría comprar varios botes hasta tener una flota de botes pesqueros. Vendería el pescado al por mayor, abrir su propia empresa, controlar la producción y la distribución. Debería salir de este "mugroso" pueblo e irse a la capital, donde podría manejar mejor su empresa en expansión".

Pescador.- "Y cuanto tiempo hace falta para eso?
Banquero.- Calculo que entre 15 y 20 años.
Pescador.- Y luego qué?  
El banquero se rió y dijo que esa era la mejor parte. "Cuando llegue la hora deberías anunciar una oferta de acciones, y  venderlas al público. Te volverás rico, tendrás millones".
Pescador.- Millones ....... ¿y luego qué?
Banquero.- Luego ya te puedes retirar. Te vas a vivir a un pueblecito de la costa donde puedas dormir hasta tarde, pescar un poco, jugar con tus hijos, hacer la siesta con tu mujer, ir todas las noches al pueblo donde podrás tomar licor y tocar la guitarra con tus amigos,  libre de preocupaciones".
Pescador.- ¿Y acaso eso no es lo que tengo ya?


lunes, 7 de enero de 2013

2013. EL AÑO DE LA SERPIENTE


El año se presenta, como un año que no será para nada fácil

Según el horóscopo chino, este año es el año de la serpiente. Se dice, que en los años de la serpiente, suponen años de cambios o de transformaciones, debido al simbolismo y la naturaleza de este reptil, que cambia de vestir, dejando su camisa atrás. Pero a nosotros, en cambio, no sabemos si mudaremos la piel o nos desnudaran nuestras vestiduras.

El año se presenta, como un año que no será para nada fácil, ya lo han mencionado diferentes instituciones, que va ser un año muy duro, habrá que estar preparados a lo que puede venirse encima. Y cuando digo preparados, es estar con los ojos bien abiertos y las orejas levantadas.

No hay que ser muy adivino, ni mucho menos un maya alentando de profecías, para acertar en la quiniela de la política a seguir en este país durante este nuevo año: la austeridad. La austeridad parece ser, que nos seguirá escurriendo nuestros bolsillos, hasta que solamente por mucho que metamos la mano hasta el fondo del mismo, solamente encontraremos las típicas pelusillas de la ropa.




Los grandes profetas, esos abuelos sabios, ya nos advertían, que cuando la vaca tiene la ubre escurrida y se le intenta sacar más leche a fuerza de escurrir, escurrir y volver a escurrir, finalmente, la vaca termina pasando a mejor vida. Y aquí paz y después gloria, sobre todo para la vaca, claro está.

De entrada, la escurridiza serpiente, nos va traer en los próximos recibos subidas de la luz y el agua, además de subidas en los medios de transporte, parece que no es muy simpática y me temo que es de las que muerden y escupen veneno. Lo que le faltaba ya a la pobre vaca.

En este 2013, todos tenemos que ser fuertes, hemos sobrevivido a la apocalipsis maya, pero ahora toca sobrevivir algo más difícil, la dura realidad.